Y cuando muera quiero convertirme en político
Veamos. ¿Y si el Purgatorio no es transitorio?. Porque si además de los pecados leves (como el nacer, estudiar poco, aprender mal, buscarse la vida y no encontrarla, votar, ir a la guerra porque la patria te necesita, blasfemar en cuanto te adelantan por la derecha (y por la izquierda), hipotecarse, engendrar hijos para que paguen por tus pecados…) cometes alguno mortal puedes estar mucho más tiempo…
¿Y si el funcionario de turno está más pendiente de sus futuras vacaciones que la de tu defunción y rellena mal algún dato?. ¿Y si los de triaje no se creen que estás muerto y te hacen esperar eternamente?
Hay que considerar todas las posibilidades y prepararse para cualquier eventualidad. Por eso, creo que la mejor opción (a estas alturas pocos lo pondrán en duda) es presentarse allí como político.
Les convences que tienes inmunidad. Que si los jueces te exculparon en tierra no hay fuego que pueda contigo. Que no es culpa tuya sino del otro. Que si están contigo los enchufas en lo que quieran. Que tu carrera era vocación por servir al pueblo pero que no lo merecían. Que no te has enriquecido más allá de lo políticamente correcto. Que la oposición es la que merece el fuego ete… no, eso mejor no mencionarlo porque en algún momento habrás estado en ese bando… en fin, que estarás en tu salsa rodeado de farsantes, mentirosos, especuladores y caraduras disfrutando de una orgía infernal.
Además podrás mantener el bronceado y el tipo a la vez. Sauna y rayos uva en una. Al menos es como lo pintan…