Anunciando la crónica de una muerte
Aquello era un cuento fruto en gran parte, de la fantasía desbordada del escritor; esto que trato ahora por el contrario, es totalmente real, aunque sin dudas, sería mejor que fuese otro cuento.
Hallado muerto en su celda el policía que asesinó a golpes a la abogada Rosa Cobo. El agente se encontraba en el módulo 13 de la prisión castellonense de Albocàsser y se quitó la vida ahorcándose con un cinturón. Este ha sido el final de Folgoso, así se llamaba el homicida suicida, la historia no (opino) acaba aquí.
Una abogada, asesinada por un excliente, esa era la primer noticia que llegaba a la opinión pública (callejera) referente a este caso; era en Septiembre del 2012. «La víctima fue encontrada muerta en el maletero de su coche que estaba ardiendo», leíamos.. «La letrada, según el decano, Eduardo Torres, llevaba años sufriendo una ‘situación de acoso’.. La preocupación que tenía la víctima le había llevado a instalar cámaras de seguridad en el garaje y la vivienda de su casa y parte del ataque que culminó con su muerte podría haber sido grabado, según la Subdelegación del Gobierno.. Un antiguo cliente y agente de la policía local, en excedencia, fue detenido por su presunta implicación en el homicidio..»
Al parecer, el agente que no quedó “contento” con un asunto que le llevó la abogada con motivo de su separación conyugal, había presentado en 2010 ante el Colegio de Abogados una queja contra la letrada, que fue archivada meses después al “carecer absolutamente de razón”, según el decano. El automóvil de la letrada había sido atacado tiempo atrás. Aunque ella tenía sospechas del autor, no le denunció porque carecía de pruebas. El detenido, con antecedentes por violencia de género al menos en el caso de su pareja anterior, había protagonizado otro incendio en el garaje de los padres de su exmujer..
La confesión del asesino de “doña Rosa”. En el vídeo que se publica con su declaración en Mayo de este 2013, Miguel Folgoso Olmo da su versión del asesinato de la abogada. Asegura que la siguió cuando entró en el garaje y niega que fuese con intención de matarla, sino que se le fue la cabeza cuando ella supuestamente le insultó.
La cámara que montó la abogada grabó su propio asesinato a manos de un cliente. «Un vídeo desmonta la tesis del policía local» que la mató a golpes. «La víctima había montado una cámara en su garaje después que le rayaran el coche. El dispositivo acabó captando cómo la asesinaba Miguel Folgoso, un cliente obsesionado..» Esto se publicada al día siguiente, cuando ya se comentaba desde mucho antes. El mismo día publicaban Las imágenes del crimen de la abogada Rosa Cobo, donde se extraen algunos fotogramas del vídeo, por evidentes razones del impacto que el visionado del mismo causarían.
La abogada estaba separada y era madre de 2 hijas.. El asesino ahora muerto, estaba separado y era padre de una hija, estas son las víctimas a las que, con estas muertes, les empieza el drama.. no se trata de jugar con las palabras en una historia que no es ningún cuento pero esta tiene un epílogo incierto, y sobre todo, sembrado de dudas razonables..
La letrada acosada ¿solo se podía proteger con cámaras?. Las filmaciones sirvieron para demostrar quién la asesinó pero ¿y a ella?. El homicida que se terminó suicidando tuvo otros intentos anteriores por lo tanto la suya ¿no es como una muerte anunciada? ¿cómo pudo ahorcarse con un cinturón? Porque dicen que así lo hizo ¿o no?
Ateniéndonos a los hechos (según las informaciones), quizá se pueda decir que cuando la justicia de los hombres no llega, es de esperar la divina o la diabólica, tanto da. Para este Folgoso (si no tenía atenuantes) tal vez esté resuelto, pero ¿está?
Fuente información: El País digital.