Matices sobre el recorte en los salarios por la crisis española y los recursos de los españoles
Los responsables en cuestión son sin lugar a dudas los trabajadores vulgares y silvestres. No debe considerarse como tales a empresarios, banqueros y sobre todo y muy especialmente, a los políticos.
A esta gente ¡Dios nos libre de hacerla responsables de nada!. Con la falta total de escrúpulos, su único propósito es el afán de protagonismo, el enriquecimiento y la obtención de poder (para conseguir más más de lo anterior) y no pueden solventar los desaguisados de una población corrupta, acomodada, incapaz y holgazana, que solo piensa en las próximas vacaciones y buscan responsabilidades en irresponsables. Y quien quiera ver cualquier ironía en mis consideraciones, lo hace porque quiere.
Es absurdo criticar a esta pobre gente cuando cometen el más mínimo error y las cosas vienen mal dadas, y del todo incoherente, porque si ellos están ahí es porque así lo hemos decidido. La solución es echarlos de una vez por todas y no gastar nuestras últimas energías en críticas vanas y del todo infructosas. El problema (nuestro, para ellos la bendición) es que mientras nos ponemos de acuerdo, van ganando tiempo y nosotros perdiéndolo poco a poco y cada vez nos quedan menos fuerza. Cuando se menciona a los 5 millones de parados, es algo literal.
Por todo esto, cuando recibo algo para pasar, paso de pasarlo porque al fin de cuentas todos pasamos pasando lo mismo. Como cantaba Serrat los versos de Machado: «todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar…»
En fin, mucho renegar de los políticos y solo consigo impregnarme de su espiritu: empiezo diciendo que voy a exponer mis matices sobre los salarios y termino matizando de todo menos de eso.
El salario de los maestros que nos preparan para la vida ¿qué preparación nos dan?. Nos enseñan historia y nos aprueban sin que aprendamos de ella. Nos inculcan nuestras obligaciones con la democracia pero no a hacer respetar nuestros derechos. Nos enseñan carrera porque aseguran, nos facilitará nuestra inserción laboral, pero no nos preparan para el desempleo. Parece que eso lo aprendemos sobre la marcha. Así que por mí, ya está bien lo que cobran.
La policia que arriesga por nosotros su vida ¿no será que nuestra vida está en riesgo con ellos?. Echaron a palos a los indignados que no debajan limpiar una plaza. Cargaron con una fuerza «proporcionada» a los gritos de unos estudiantes… y algunos de ellos, se asocian con traficantes y estafadores. Si decidieran delinquir todos los que sintieran estar remunerados por debajo de sus prestaciones…
Los bomberos nos salvan la vida, siempre y cuando no estén manifestándose por falta de recursos. O en uno de sus días de descanso, porque sí, indudablemente su trabajo es de alto riesgo pero si no acuden a algún siniestro, sus turnos de trabajo son sagrados. Pero seamos realistas y sobre todo, actualicemos conceptos: ¿acaso no es de alto riesgo la simple y primaria necesidad de ir al supermercado?. ¿Le han preguntado a cualquier desempleado con hipoteca y una familia que mantener?.
Los médicos que nos mantienen con vida ¿qué merito tiene decirte que no tienes nada y mandarte a casa con 4 pastillas y recomendación de reposo?. Y no digamos hacerte esperar 1 año para una radiografía y otro más para una resonancia porque en los rayos X no se vé nada. O extraviar tu expediente y ponerte en la cola como si fuese culpa tuya. Y considerar una deformación de vértebras como una leve lumbalgia…sí sí ya lo sé, me apartan del caso porque lo tomo como algo personal. Vale, pero sepan que tengo pruebas…
Y los diputados. Esto ya es otro cantar, esta gente es una clase de terrícolas que requiere un tratamiento diferencial. Sea cual sea nuestra elección, siempre nos equivacamos. Sea cual sea su tendencia política, todos actuan como políticos: dan soluciones desde la oposición y olvidan sus intenciones cuando gobiernan. Desprestigian a su oponente con la mejor de sus sonrisas. Prometen lo imposible, conscientes que nos agarraremos a un clavo ardiendo sabiendo que nos quemará. Su inoperancia la revierten en desacreditar a todo antecesor. Intentan recuperar despilfarros y déficit económico, obligando a los de la mitad para abajo a romper sus huchas y pobre aquel que no tenga, a ese lo despojan de todo derecho y lo hunden en la miseria. Cuando de vez en cuando (de tanto en tanto, de mucho en más) se descubre un delincuente no pasa nada, a donde no lo cubre su inmunidad dipomática, lo salva los vericuetos legales.
Cuando un terrícola del resto, obtenga ilegalmente algún dinero, en un acto de deseperación absoluta, y se libre de la cárcel por la desición indulgente de algún magistrado, haré referencia a mis consideraciones y me retractaré adecuadamente.
Mientras esto siga así, a día de hoy, respecto al salario de los diputados creo que es el adecuado. ¿Cuántos hay que sean capaces de hacer lo que hacen ellos y se levanten cada día convencidos que es lo correcto? ¿Cuántos que se sepan inútiles pueden mantener el tipo como si no lo supiéramos? ¿Cuántos son capaces de salvar la criba para estar ahí aunque sean pocos los requerimientos exigidos?
Para pedirnos el voto y después olvidarse de nosotros hay que tener mucho temple y descaro. Eso vale lo que cobran. Aunque tarde, lo reconozco, de mayor quisiera ser político. No puede haber mejor oficio para pasar de las crisis.