A propósito de hacer un propósito para Navidad
Hagamos un propósito: Comprar los regalos
de Navidad a pequeñas empresas y
autónomos. La vecina que vende por
catálogo o por internet, el artesano que hace
bisutería, la amiga que tiene una tienda en el
barrio, el pastelero que hace los turrrones
artesanos, el chico que tiene la parada del
mercado… Hagamos que el dinero llegue a
personas comunes y no a grandes
multinacionales. Así, más personas tendrán
una mejor Navidad. Si te parece una buena
propuesta, copia y pégalo. Apoyemos a
nuestra gente!
Esto es «un propósito» compartido del Facebook de ANiMarte MAcrAMé, de Costa Rica, donde promueven el arte hecho a mano y, como se puede comprobar con este mensaje, también se preocupan por promocionarlo…
El propósito es bueno, de ahí que, tal como proponen, lo he copiado y pega… no, en realidad tuve que copiarlo y escribirlo letra a letra porque la propuesta estaba en una imagen y aunque estuviese hecha a mano, se pixelaba en exceso y así, seguro que pocos lo comprarían por muy artesano que fuese.
El problema es que «para ayudar a nuestra gente», este propósito me supone tener que comprar cosas con las que mis navidades serían más filantrópicas pero no mejores. Y diré porqué.
La vecina que en mi pueblo vende por internet, comercia con juguetes eróticos y así, sin darle muchas vueltas, creo no es regalo para navidades (más que nada por los niños que verían abrir los paquetes).
Al artesano que hace bisutería igual pruebo de comprarle algo, porque estoy cansado de adquirir siempre joyas de marca. A ver si su manufacturado deja menos marcas.
En mi barrio no hay tiendas (de verdad) y las amigas que tengo no tienen tienda, así que esta, tampoco me vale.
El pastelero que hace turrones artesanos, es autónomo pero no tiene empresa pequeña… y la mayoría de turrones los saca de la vista del publico por semana santa, de vergüenza nomás. No hay quien los coma.
El chico que tiene la parada en el mercado sí, le compramos todo el año así que para navidad también. Lo malo es que vende frutas y verduras y la verdad, para regalar…
En lo que más estoy de acuerdo es en no comprar en grandes multinacionales pero claro, me jode que las empresas pequeñas intenten recuperar por la navidad, las ventas que no hacen durante el año.
De todos modos, que sepan que han provocado en mí una reacción inmediata: me he decidido a cancelar el pedido de un jamón ibérico que había tramitado en Mercadona.
Ahora tengo que comentar este propósito con la familia, para que revisen sus pedidos navideños que me permita llevarlo a cabo. Y eso, siempre y cuando Santa Claus me pueda llevar de compras.